en la otra orilla de la noche
el amor es posible
-llévame-
llévame entre las dulces sustancias
que mueren cada día en tu memoria.
(Alejandra Pizarnik)

IV

En la otra orilla te espero cada noche
desenredando las penas del día,
susurrando nanas de esperanza,
tarareando suspiros de deseos
y ensayando sonrisas que prometan
las dulzuras que en sueños te entrego.